Plazo de recogida y entrega de la mudanza | Diccionario de Mudanzas

Los plazos adicionales razonables de recepción y entrega de las mudanzas en caso de factores externos desfavorables.

El cumplimiento de los plazos de recogidas y entregas de las mudanzas es un activo estratégico de gran valor para el porteador. No obstante, en caso de mudanzas de largo recorrido el porteador puede tener ciertas dificultades en demostrar la puntualidad en el plazo de la recogida o entrega de las pertenencias del cliente. El tráfico, los atascos, las condiciones meteorológicas, las paradas no planificadas para combatir los peligros de la fatiga al volante, el vehículo que puede fallar, son algunas causas que pueden producir retrasos.

Con el propósito de evitar fallos por parte del cliente en la organización de la entrega/recepción de sus bienes en el origen/destino de la mudanza, sobre estas hipotéticas circunstancias imprevisibles el porteador le debe comunicar previamente.

En el caso de dificultad (por las razones interpuestas anteriormente) de pactar los plazos exactos, la recogida y/o entrega de la mudanza deberán ser efectuadas "… dentro del término que razonablemente emplearía un porteador diligente en realizar el transporte, atendiendo a las circunstancias del caso"(ver el apartado 1 del artículo 33 de la Ley 15/2009, de 11 de noviembre, del contrato de transporte terrestre de mercancías).

El apartado 4 del mismo artículo dice: "El plazo de entrega empieza a correr con la recepción de las mercancías para su transporte. Se prorrogará por el tiempo que las mercancías estén paradas por causa no imputable al porteador y su cómputo se suspenderá los días festivos y los inhábiles para circular".